jueves, 6 de enero de 2011

Devuelvan la poesía...

No se si es mi idea, pero se han dado cuenta que cada día hay menos poesía. Al parecer los poetas y las poetizas han migrado, como nuestros viajantes tristes, pero a otra dimensión. Los grandes poetas ahora son solo figuraras fantasmagóricas que pululan en la memoria de los más viejos. Es triste pero cada vez coincidimos menos gente en las perchas poéticas.

Me acuerdo que antes hasta poemas de memoria nos sabíamos:

“Justo Brito y Juan Tabare,
hombres de vera y peinilla
como no pare otra madre,
por una vieja rencilla,
en el lugar que se vieran
la muerte juraron darse”.

Ahora no, todo les suena cursi, viejo, anticuado, siento a ratos que les avergüenza sentir. Les da miedo que las palabras les sepan muy dulces, como si un soneto de amor les pudiera engordar, hasta en eso parece que quieren cuidan su figura.

Dígamen que tiene de añejo esto:

“Ah vastedad de pinos, rumor de olas quebrándose,
lento juego de luces, campana solitaria,
crepúsculo cayendo en tus ojos, muñeca,
caracola terrestre, en ti la tierra canta!”

O quién alguna vez no plagió esto (o algo de él mismo autor):

“Te propongo construir
un nuevo canal
sin exclusas
ni excusas
que comunique por fin
tu mirada atlántica
con mi natural
pacífico”.

¿Será que ya no nos pone los pelos de punta esto?

“A la cara de mi hijo
que duerme, bajan
arenas de las dunas,
flor de la caña
y la espuma que vuela
de la cascada...”

Devuelvan la poesía vean, no sean malitos!!!